CIRCULO VICIOSO: REALIDAD VS VIRTUALIDAD

The Circle es un reality de Netflix que se estrenó el 1 de enero; es un concurso de popularidad entre distintos personajes que pretende ser un intento de experimento social. Recurre al formato de las redes sociales para que gane el mejor influencer del grupo llevándose un premio de 100.000 dólares.

El primer capítulo comienza con las presentaciones de las normas y los jugadores (No se van a ver ni escuchar, solo se conocerán por su foto de perfil e interactuarán a través de un chat), nos aclaran que habrá concursantes que no son quienes dicen ser. El mensaje que transmite durante toda la temporada es el conocido refrán: “Juzgar a un libro por su portada”, algo muy superficial y estético.

Muchos coquetean, como si fuera “un tinder moderno” creando conversaciones superficiales usando emojis y hashtag; nadie habla de cosas interesante, no hay un trama que seguir más allá de ver quién engaña más a quién, esperar a una expulsión o estar pegado al televisor esperando algún juego o calificación, demostrando una miseria, falsedad y un manejo que asombra, con el único fin de ganar popularidad y llegar a

la final. Esto muestra el absoluto patetismo y, al mismo tiempo, enganche de un público en cuarentena que está aburrida y se desespera por ver algo que los entretenga.

The Circle es un formato original de Channel 4, que Netflix ha adaptado, en sus tres versiones -USA, Brasil y Francia-. Si debo destacar algo por el cual considero que este reality funciona es por la elección estratégica de los personajes y el escenario, están perfectamente unificadas. Pero con esto no alcanza, parece que está previamente planificado y guionado, todo el tiempo se busca la autenticidad que nunca logra, con sus personajes estereotipados.

Aunque todos, en mayor o menor medida, intentamos encasillar y agradar para hacer amigos o compañeros. Acá no consiguieron ese resultado.

Si lo vemos como un reflejo de la sociedad, se puede decir que extremaron la utilización de las redes sociales. Si bien en este último tiempo se ve un uso masivo de los dispositivos, ¿las personas rigen sus vidas según la popularidad online obtenida? Si bien existe la falsedad en redes, este programa no se compara con la realidad, solo fue un círculo -como su nombre lo indica- dónde se encierra a diferentes personalidades, sin estar condicionados por el exterior, cosa que en la vida real si sucede.

Todo el tiempo sentí estar viendo el videojuego los Sims pero de carne y hueso, sin creer que sea la realidad que se plantea.